lunes, 17 de diciembre de 2012


LA SESIÓN DE REIKI:


No se puede generalizar, ya sabemos que cada persona es un mundo y sus circunstancias… No obstante, si te decides a recibir tu primera sesión de Reiki, esto es, a grandes rasgos, lo que puedes esperar:



-¿CÓMO ES UNA SESIÓN DE REIKI?-


La duración aproximada es de 1 hora. El paciente se tumba en la camilla y se relaja con los ojos cerrados hasta el final de la sesión. No es necesario desnudarse, basta con descalzarse y se recomienda llevar unos calcetines gruesos (es muy habitual la disminución de temperatura).



El terapeuta no te dará un masaje, simplemente pondrá sus manos sobre diferentes partes de tu cuerpo para permitir el flujo de energía; normalmente se comienza por los 7 chacras principales; después se canalizará energía por diferentes chacras menores en diferentes puntos de los brazos y de las piernas, para terminar aplicando Reiki en cualquier parte del cuerpo que lo demande.



En algunos casos notarás las manos de tu terapeuta sobre el cuerpo y, en otros casos, las colocará a cierta distancia...



-¿TENGO QUE SENTIR ALGO?-



Cuando te están aplicando Reiki, puedes sentir que las manos del terapeuta desprenden calor, frío o cosquilleo; todo ello es normal, cada uno percibe la energía de distinta forma.
Una vez que la energía comienza a entrar en tu sistema, la primera sensación es de relajación intensa y paz mental. Déjate llevar y disfruta de del momento. Algunas personas visualizan colores, otras se quedan dormidas. Todo normal, no hay que cohibirse, ni paciente ni terapeuta. Es habitual la disminución de temperatura corporal durante la sesión; avisa a tu terapeuta para que te abrigue.



Durante la sesión, la Energía Vital Universal entrará en tu sistema energético y limpiará todo a su paso; bloqueos emocionales, experiencias traumáticas o dolorosas sin sanar se remueven por dentro para comenzar su proceso de sanación. Aunque la sesión transcurre en silencio, puede ser que, en un momento determinado, el paciente sienta la necesidad de decir algo, llorar, reir, suspirar… ¡No te asustes ni te avergüences! es mejor no contenerse y dejarlo salir. Esto es señal de que la energía está comenzando a sanarnos. Un buen terapeuta continuará aplicando Reiki y te acompañará en durante el proceso.



Si tienes algún problema físico (dolor en articulaciones, estreñimiento, dolores menstruales, gases, etc.) es posible que, al poner las manos en la zona correspondiente, sientas algún dolor o como si algo se removiera dentro; también puedes comenzar a toser o aumentar tu secreción nasal. También es normal y es buena señal, estamos sanando.
También se da el caso de personas que no sienten nada durante la sesión (ni frío ni calor, no ven colores ni ríen, ni lloran, ni nada… También es normal y no quiere decir que el Reiki no haya funcionado. Deja pasar unos días y seguro que comienzas a sentir los cambios que se están realizando en tu interior.
Todos estos síntomas pueden agravarse los días posteriores a la sesión. Muchas personas se asustan y creen que el Reiki les ha empeorado. Esto también es normal y se llama Crisis de Sanación. Sigue adelante con las sesiones, te sentirás mejor y es señal de que la Energía Vital Universal ha comenzado tu proceso de sanación. Mantén informado a tu terapeuta...



-TEN EN CUENTA QUE:-



Tu terapeuta de Reiki no necesita saber qué enfermedad tienes para tratarte pero, si consideras oportuno informarle sobre algún tema que quieras tratarte en particular o una dolencia grave, no dudes en hacerlo (por ejem.: que lleves marcapasos, sufras una depresión grave, etc.).



Si sufres alguna enfermedad y consideras tratarla también con Reiki, recuerda que la Energía Vital Universal no sustituye a los medicamentos y tratamientos de tu médico, pero sí ayudará a que sean más efectivos y llevaderos.



No es necesario que estés enfermo para recibir la Energía Vital Universal; el Reiki es una herramienta excelente de crecimiento personal y puede ayudarte a expandir tu espiritualidad (no importa las creencias que tengas).

-REIKI II-




-REIKI II:


Una vez descubierto el Reiki, si piensas que puede ayudarte en tu vida, tienes 2 opciones para disfrutarlo:

>Buscar un terapeuta que te ofrezca confianza y acudir a sesiones periódicas de tratamiento.

>Iniciarte en el Reiki y comenzar tu propia autosanación (y la de tu familia, amigos, mascotas… pacientes).

Si decides aprender, existen 4 niveles de aprendizaje y eso, es lo que os voy a contar hoy:


-NIVEL I – EL DESPERTAR-

Toda relación comienza con las presentaciones: conocerás la historia del Reiki, sus usos y aplicaciones, cómo funciona nuestro sistema energético…
La verdadera aventura comienza con la sintonización o apertura de los canales energéticos, eso nos permite recibir la Energía Vital Universal. A partir de la sintonización, el alumno ya es capaz de canalizar energía, tanto para autosanación como para sanar a los demás a nivel físico.



-NIVEL II – LA TRANSFORMACIÓN-



El segundo curso sirve para profundizar en el Reiki: se aprenden los primeros símbolos, la sanación a distancia, trabajar con cristales y, lo más importante, avanzamos como terapeutas hasta las emociones.
Con la sintonización en nivel II, tu potencial aumenta y sientes como la energía fluye con mayor intensidad. Ya podemos sanar también a nivel emocional.


-NIVEL III – LA REALIZACIÓN-



Si el Reiki te ha enganchado y quieres profundizar en tu camino espiritual de realización, ésta es la “Maestría interior”. Es el nivel más duro y el más gratificante a la vez. Requiere mucho trabajo interior para avanzar en nuestro camino a la “iluminación” pero las recompensas son enormes.

Con la sintonización en nivel III, comienzas a trabajar la compasión, el perdón, el ego, la intuición… Ahora ya puedes sanar también a nivel espiritual.

-MAESTRÍA – EL CONOCIMIENTO-

El Reiki es un regalo. Si te sientes generoso y deseas compartirlo con los demás en este nivel aprenderás a enseñarlo, te convertirás en Maestro.

Dejar que el Reiki entre en tu vida es una decisión de la que nunca te arrepentirás; tanto si sólo recibes cómo si llegas a ser un Maestro. No importa tu edad, creencias o ideologías. Si estás sano te ayudará a equilibrar tu organismo, reorganizar tus prioridades y encarar la vida más saludablemente. Si estás enfermo, la Energía Vital Universal puede ayudarte a potenciar tu tratamiento médico, disminuir posibles efectos secundarios y, sobre todo, a relajarte (te recuerdo que el Reiki nunca sustituye a la medicina convencional, la COMPLEMENTA).

¡No pierdes nada por probar, pero puedes ganar mucho!
 

EL AURA



EL AURA:

Es nuestro campo energético; la radiación de energía que envuelve nuestro cuerpo. Nuestra aura está constantemente interactuando con otros campos energéticos: los árboles, las montañas, el río, los minerales, los animales, otras personas… es por eso que es tan importante vivir en armonía con lo que nos rodea y con quienes nos rodean.

¿Nunca te has fijado que, sin conocer a alguien, sientes automáticamente afinidad o rechazo? Tu aura te precede e interactúa con el aura del desconocido antes de que tú siquiera hables con él…

El aura está compuesta de siete capas superpuestas, cada una de ellas con una finalidad distinta, y que se corresponden con cada uno de los 7 chakras principales.

-SOBRE LA ENERGÍA I-


-SOBRE LA ENERGÍA I:-

Todos los seres vivos tenemos energía, desde la célula más pequeña hasta el planeta Tierra girando alrededor del sol.
Al igual que el sistema circulatorio o nervioso, el cuerpo humano tiene un sistema energético. Multitud de factores externos (enfermedades, accidentes, etc.) o internos (stress, traumas, etc.) pueden desequilibrar nuestro sistema energético y dar lugar a peor
es dolencias.

Tomemos como ejemplo una persona con un gran nivel de stress en su trabajo que podría terminar creando una úlcera de estómago. Por supuesto que, lo primero, es ir al médico para atajar los síntomas físicos pero, si no tratamos la causa principal, el stress, la úlcera volverá a producirse.

Con el tiempo y mucho estudio, he comprobado que hay formas de influir en nuestro sistema energético equilibrandolo y consiguiendo una armonía que nos aportará paz mental, emocional y espiritual (con el Reiki, las piedras, la meditación, etc).

Este equilibrio no sólo favorece la salud de nuestro cuerpo físico, también nos proporciona fuerza para enfrentarnos a las duras pruebas que nos pone la vida, alivio en momentos de sufrimiento y bienestar en el día a día para nosotros y para los que nos rodean.

-¿QUÉ ES EL REIKI?-

-¿QUÉ ES EL REIKI?-

El Reiki es una Terapia Energética de Sanación de origen japonés, descubierta por Mikao Usui a principios del siglo XX (1922). Como la mayor parte de la medicina oriental, es una terapia Holística, es decir, que trata las enfermedades no sólo a nivel físico (como en nuestra medicina occidental) sino también a nivel emocional, mental y espiritual.

-Para entendernos mejor:

-Una persona estresada podría terminar sufriendo úlcera de estómago. Nuestra medicina actual tratará los síntomas físicos de la dolencia hasta curarla pero, si la razón de su estrés no es descubierta y tratada, la úlcera volverá a aparecer sin perder tiempo. Y las razones del estrés, todos lo sabemos, pueden tener un origen muy diverso: problemas personales, laborales, de pareja o, incluso, de traumas infantiles no tratados.-

-¿UNA TERAPIA ENERGÉTICA DE SANACIÓN?-

Todos los seres vivos tenemos energía, desde la célula más pequeña hasta el planeta Tierra girando alrededor del sol. En cada uno de nosotros existe una Energía Vital (KI) capaz de mantener armonía dentro de nosotros; a nivel universal, existe una energía superior capaz de armonizar a toda la creación. Esa energía se conoce como Reiki (REI-Universo, KI-Energía Vital).
Al igual que tenemos un sistema circulatorio o un sistema nervioso, nuestro cuerpo también tiene un sistema energético (bastante poco estudiado en nuestra medicina, por cierto). La terapia energética utiliza este sistema del cuerpo humano para gestionar la energía y asegurar su correcto funcionamiento. El Reiki, como terapia, utiliza la Energía Vital Universal no sólo para armonizar, sino para sanar a todos los niveles.

-Otro ejemplo:

-El corazón bombea la sangre por todo nuestro cuerpo del mismo modo, nuestros centros de energía (también llamados chakras) regulan el flujo de energía por los distintos órganos para que estén equilibrados y en armonía.-

La tendencia natural de nuestro cuerpo es la salud, pero factores externos (enfermedades, accidentes, …) o internos (estrés, traumas, pérdidas o rupturas emocionales, etc.) pueden desequilibrar nuestro sistema energético y dar lugar a peores dolencias (como he explicado en el ejemplo de la úlcera) o a demorar la obtención de resultados en los tratamientos médicos convencionales.

Un terapeuta de Reiki sirve de canal para que nuestra propia energía entre en contacto con la
Es por esto que el término Terapia Alternativa le gusta tan poco al Maestro de Reiki, que insiste en aclarar que es COMPLEMENTARIA a los medicamentos y tratamientos de nuestros doctores.

-PERO, ¿ÉSTO FUNCIONA?-

Para empezar, el Reiki produce un alivio rápido de los dolores físicos, además de relajarnos y subir las defensas de nuestro organismo. Mueve las emociones para conseguir reequilibrio, paz y relajación; y a nivel mental nos ayuda a algo fundamental en estos tiempos tan locos que vivimos: calmar nuestra mente. Todos estos puntos son fundamentales en nuestro día a día y, sobre todo, cuándo nos enfrentamos a enfermedades con tratamientos largos e invasivos.

Si ya queremos profundizar aún más en el YO espiritual, el Reiki desarrolla nuestra intuición, ayuda a conectar con nuestros guías y a reafirmar nuestros propios principios y creencias.

Estamos hablando de una terapia que no tiene contraindicaciones ni efectos secundarios; compatible con cualquier otro tratamiento médico. No requiere ningún tipo de manipulación ni masaje, simplemente una imposición de manos. Además, cualquiera puede recibirlo sin importar edad, condición, estado de salud…

-¿PUEDO YO APRENDER REIKI?-

Al igual que para recibirlo, cualquiera puede convertirse en un canal de Reiki. No tiene filosofía ni religión, ni necesita largos periodos de aprendizaje. Tras la primera sintonización ya eres un canal de energía y puedes empezar a aplicarla inmediatamente y para el resto de tu vida.

-Todos estamos conectados desde nuestra concepción pero alrededor de los siete años, cuándo empezamos a aprender a ser independientes, cerramos el canal. En eso consiste la sintonización, en abrir el canal de nuevo.-

No es necesario conocer el diagnóstico médico de un paciente para aplicar Reiki de manera exitosa. Por otro lado, no supone una pérdida de energía propia (KI) del terapeuta o del paciente ya que en todo momento se está canalizando la Energía Universal, que es ilimitada; este hecho convierte al terapeuta en receptor de esa energía y, al igual que el paciente, también se beneficia del tratamiento.

Puedes aplicar Reiki a enfermos y sanos, a TI mismo, a bebés y a abuelos. También a animales, plantas, piedras, alimentos, agua…